Robert Allen Zimmerman, más conocido como Bob Dylan, hizo una incursión en el country con esta composición fechada en noviembre de 1962, que incluyó en su disco The Freewheeling Bob Dylan del año siguiente.
El tema cuenta con infinidad de versiones. Primero, vamos a escuchar aquella en la que se inspiró Dylan para componer su canción, Who’s Gonna Buy Your Ribbons When I’m Gone, de Paul Clayton (1960), que presenta la misma melodía. El “robo” no minó la amistad entre ambos, y, aunque sus respectivas discográficas se interpusieron diversos pleitos, la buena relación entre ellos continuó hasta la prematura muerte de Clayton en 1967. La versión original de Dylan simplemente cambia la letra.
El grupo Peter, Paul and Mary hizo una versión en 1963 con un toque folk.
Hugues Auffray, amigo de Dylan, no tardó en adaptar la canción al francés con el título N’y pense plus, tout est bien.
Escuchemos ahora la versión de Johnny Cash de 1964.
En mi opinión, una de las mejores es la que hizo Waylon Jennings en 1970, correspondiente a su álbum Don’t think twice.
Recientemente, la gran dama del country Dolly Parton, en Blue Smoke (entrada del 13 de mayo), versionó también este tema.
E independientemente de todas estas versiones, probablemente algunos de vosotros la reconoceréis por la serie televisiva Mad Men.
Nunca he sido demasiado proclive a la música country, pero he de reconocer que me estás haciendo cambiar de opinión a medida que, gracias a tus entradas, voy conociendo temas y artistas de los que no sabía nada. Gracias, amigo.
El problema es que la música country actual ha perdido un poco de su esencia y está cada vez más influida por la música pop. Pero en realidad el country clásico es otra cosa. Me alegro que descubras cada día algo nuevo.
Pues coincido contigo en la versión de Waylon Jennings. La de Peter, Paul & Mary también están muy bien, y siempre es un gustazo escuchar a Johnny Cash y a Dolly Parton. Es curioso esto de los derechos de autor, siempre preocupa más a las multinacionales que a los propios autores. Saludos Eduardo.
La de Waylon Jennings es la primera que escuché y durante mucho tiempo incluso creí que era suya de lo bien que la interpreta.