La historia que cuenta esta canción se refiere a un accidente de coche en el condado de Carroll, Maryland, no muy lejos de Baltimore, por situarnos mejor en el mapa. Es un condado donde nunca pasa nada –lo dice la canción, no yo–, y por eso el accidente es considerado un gran acontecimiento. Walter Browning, un hombre felizmente casado, y que goza de buena posición en su comunidad, pierde la vida y no se le encuentra el anillo de boda en el dedo. La dueña del coche sobrevive, y testifica que Walter le paró diciendo que se encontraba mal y que lo acercara a la ciudad. El narrador de la canción –luego sabremos que es su hijo– va al lugar del siniestro y encuentra el anillo escondido en la guantera. Se deshace de él para preservar la respetabilidad de su padre, ya que es una prueba inequívoca de su infidelidad. Finalmente, las autoridades del condado levantan un monumento de mármol al difunto.
Escuchad la grabación original de Porter Wagoner en RCA de 1968, que consiguió el Premio de la Asociación de la Música Country al año siguiente.
Dolly Parton la grabó en su álbum In the Good Old Days (1969).