Vamos hoy con una canción country de sabor mexicano. Una de sus creadoras, Louise Massey, tenía especial predilección por este país: creció y vivió en Roswell, Nuevo México, grabó en español en más de una ocasión y cada vez que aparecía sobre el escenario lucía vestidos típicamente hispanos.
El hecho de que abandonara su carrera a finales de los 40 hace que hoy no sea muy recordada, pero Massey fue uno de los primeros rostros femeninos que se dedicó al country (aunque no en solitario, sino como componente del grupo The Westerners, junto a sus hermanos y su marido). El single en el que apareció esta canción fue editado por Okeh Records con una cara B en la que sonaba I left my heart in Texas.
My adobe hacienda es una canción nostálgica, de las que tanto proliferaban en aquella época. El protagonista canta las alabanzas de su finca de adobe, anclada en las colinas del Oeste.
Os dejo con la versión original de Louise Massey en 1941.
Seis años después la grabó Eddy Howard.
Vamos ahora con la interpretación de The Browns en su disco Town and Country (1960).
Hank Snow y Anita Carter la cantaron a dúo en 1962.
Escuchemos otra grabación de los años 60, encuadrada en el sonido Nashville. Se la debemos a Don Gibson y está incluida en el álbum Don Gibson and los Indios Tabajaras.
Hoy escucharemos extractos de un disco de música folk que fue decisivo para la carrera de los canadienses The Rankin Family. Fue su segundo trabajo, y, en un principio, lo editaron de forma independiente en 1990. La popularidad que alcanzaron en Canadá los puso en la órbita de Capitol Records, que reeditaría el disco dos años más tarde. Su importancia radica en la revitalización de la música celta (luego escucharemos una canción en gaélico).
La canción que lo abre lleva por título Orangedale Whistle. Fue compuesta por uno de los miembros del grupo, Jimmy Rankin, que actualmente prosigue su carrera en solitario.
También obra de Rankin, escuchemos ahora el tema que da título al disco, Fare Thee Well Love, en el que el narrador se despide de su amada. El single tuvo un considerable éxito en Canadá.
En el disco hay cabida para canciones tradicionales de autor desconocido, como esta Fair and Tender Ladies, que ya era conocida en tiempos inmemoriales en la región de los Apalaches con el título de Tiny Sparrow.
Este último tema ha tenido multitud de versiones. Escuchemos la de Anita Carter en 1962.
Vamos con otro tema de raíz tradicional –este cantado íntegramente en gaélico–, An T Each Ruadh (El caballo rojo).
Gillis Mountain fue escrita por Raylene Rankin en recuerdo de una montaña de su región natal de Canadá, Nova Scotia.
Hank Williams consiguió otro single de éxito para MGM Records con este I Can’t Help You if I’m Still in Love With You, que grabó en Nashville en marzo de 1951.
La canción, hoy todo un clásico, comienza con un lamento de guitarra de Don Helms. El narrador no se hace a la idea de que su anterior pareja haya rehecho su vida: “No lo puedo evitar si todavía estoy enamorado de ti”.
Williams contó para este tema con la colaboración de sus habituales, los Drifting Cowboys, esto es, el citado Don Helms, Jerry Rivers, Bob McNett, Hillus Butrum y Ernie Newton.
Vamos ahora con una de las pocas apariciones de Hank Williams en televisión. En este vídeo, de abril de 1952, interpreta la canción con Anita Carter.
Linda Ronstadt nos brindó esta versión en su álbum Heart Like a Wheel (1974).
Patsy Cline la canta de una forma más lenta en Sentimentally Yours (1962) con los coros de The Jordanaires.
Ray Price, amigo de Hank, sacó un álbum versionando temas de este. Apareció en 1976 con el título Hank and Me.
A principios de su carrera musical, con apenas 19 años, Ricky Nelson la grabó en Ricky Sings Again (1959).
En la colección que Charley Pride dedicó a Hank Williams, There’s a Little Bit of Hank in Me (1980), también aparece esta canción. Escuchémosle en una aparición promocional en televisión.
Otro de los grandes del country, George Jones, la incluyó en su George Jones Salutes Hank Williams (1960).
Aunque la familia Carter sobrellevó mejor que otros el descenso de consumo propio de la Gran Depresión, sus discos no se libraron tampoco de la coyuntura económica. Por ello, vieron con muy buenos ojos la propuesta del empresario de la Consolidated Royal Chemical Corporation, John Romulus Brinkley, que, como parte de su imperio, había creado una cadena de radio para, fundamentalmente, promocionar sus productos médicos contra la impotencia.
El caso es que en Estados Unidos su proyecto hizo aguas, ya que las autoridades desconfiaban de su praxis (que consistía en injertar trozos de glande de cabra en los testículos de sus pacientes, a consecuencia de lo cual muchos de ellos lo demandaron) y le terminaron quitando la licencia. Pero Brinkley no se rindió y fijó la sede de su nueva radio al otro lado de la frontera, cerca de Texas, donde la legislación era más laxa.
Con potencia para cubrir toda la geografía estadounidense, ofreció un suculento trato a los Carter: un programa radiofónico diario por 75 dólares a la semana. La experiencia en las ondas no era nueva para ellos, pues en 1936 ya habían hecho una breve incursión en este medio para la Decca Records.
Aunque el trabajo conllevaba trasladarse a Texas –el programa se emitía desde San Antonio– y dejar su tierra natal, no dudaron en aceptar, ya que constituía una oportunidad para llegar a todos los rincones del país e incluso a algunos lugares de Canadá.
Así, en otoño de 1938 iniciaron una nueva vida en Texas, y fruto de su éxito Brinkley los fichó para una nueva temporada en la que, además, figuraron por primera vez las hijas de Maybelle, Helen, June (que se casaría con Johnny Cash) y Anita.
Como os dije en su momento, A.P. y Sara se habían separado en 1933, aunque siguieron trabajando juntos. La reconciliación no fue posible y en 1936 se divorciaron. Recordaréis que una de las causas de la ruptura fue que Sara se había enamorado del primo de A.P., Coy Bays, que a la sazón vivía en California. Sara no lo había olvidado, y en febrero de 1939 le dedicó una canción por la radio, I’m Thinking Tonight of My Blue Eyes (ya escuchada aquí). Cuando Coy la oyó, se fue a Texas, y allí se casaron a finales de ese mes. I’m Working on a Building es un tema religioso de A.P. Carter cuya letra nos presenta a varias personas –un mentiroso, un bebedor y un predicador– que quieren trabajar en un edificio para el Señor. Escuchemos la grabación que hizo la familia Carter en junio de 1936 para el Associated Program Services.
Ahora, una interpretación de las hijas de Maybelle Carter, Helen (12 años), June (10) y Anita (6) del cásico del bluesCorina Corina –escrito en 1928– en San Antonio en 1939.
The Cyclone of Rye Cove está basada en un hecho real. En mayo de 1929 el peor ciclón de su historia asoló Virginia y acabó con la vida de una docena de niños de una escuela. A.P. Carter se inspiró en este suceso –él mismo había colaborado en las tareas de rescate– para componer esta canción.
¿Qué pasa con la Navidad? ¿Cuándo empezaron a languidecer estas fiestas? ¿Quizá el día en que murió Johnny Cash? Hoy vamos a hacer un recorrido por los discos de este género que grabó el incomparable “hombre de negro”.
Su primer álbum sobre esta celebración fue The Christmas Spirit, en noviembre de 1963, su única entrada en las listas de álbumes country con un disco navideño. De las 12 canciones que contiene, él escribió cuatro.
¿Escuchamos dos muestras? No hay opción: escuchamos dos muestras. I heard the bells on Christmas Day es un villancico basado en un poema de Longfellow, que este escribió durante la Guerra de Secesión inspirándose en su hijo, que se alistó sin que él lo supiera y resultó gravemente herido poco antes de Navidad. Una década después John Baptiste Calkin le añadió letra.
Blue Christmas fue escrita en 1948 por Bill Hayes y Jay Johnston. Hasta que Johnny Cash la grabó para este álbum, la versión más conocida era la de Elvis Presley de 1957.
The Johnny Cash Family Christmas salió en 1972. Producido por Larry Butler, también maestro del piano, consta de diez pistas en las que intervienen miembros de la familia y amigos de Johnny, por ejemplo su esposa June Carter, su hermano pequeño Tommy, su cuñada Anita Carter, su suegra Maybelle Carter o sus amigos Carl Perkins y Lew DeWitt. Jingle Bells, por extraño que parezca, no nació como una canción navideña, sino para el día de Acción de Gracias. Fue escrita por James Lord Pierpont en 1857 y publicada con el título One Horse Open Sleigh.
Harold Reid, componente de los Statler Brothers, que también intervienen en los coros, es el autor de King of Love.
Ninguna de las canciones que componen el tercer disco navideño de Johnny Cash, Classic Christmas (1980), fue obra suya, sino que todas recuperan clásicos de siempre.
Comencemos con Silent Night, una de las canciones navideñas más populares, compuesta en 1818 por un profesor de primaria austríaco, Franz Xaver Gruber, con el título Stille Nacht, y a la que Joseph Mohr puso letra. Esta es la única canción que aparece en todos los álbumes navideños de Johnny.
Away in a manger es uno de los villancicos más populares del mundo anglófono -en 1996 una encuesta de Gallup lo situó en el segundo puesto. Fue compuesto a finales del siglo XIX por William J. Kirkpatrick y James R. Murray.
Finalmente, en 1991 salió al mercado Johnny Cash Country Christmas. A diferencia de los tres anteriores, que habían sido editados por la Columbia, este apareció bajo el sello Delta Records, mucho menos conocido, por lo que es más difícil de conseguir. Contiene 13 canciones, la mayoría segundas grabaciones que Cash había ya incluido en alguno de sus discos previos navideños.
Escuchemos en primer lugar O Little Town of Bethlehem, un poema episcopaliano, la denominación que reciben los anglicanos en Estados Unidos, escrito por Philip Brooks y al que el organista Lewis Redner añadió música allá por 1860.
Unos años antes, otro sacerdote, Edmond Sears, escribió la letra de It Came Upon a Midnight Clear, con música de Richard Storrs Willis. En la grabación de Johnny Cash aparece su mujer June Carter.