Honkytonkville. George Strait, 2003

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Hoy vamos con un disco de una leyenda viva del country, George Strait, concretamente su vigésimo segundo álbum, editado por MCA Nashville en 2003. Honkytonkville constituye una prueba más de lo buen cantante que es Strait, quien, aunque no escribió ninguno de los temas que lo componen, se apoyó en lo más granado de la industria del momento.

Se abre con She Used to Say That to Me, escrita por Jim Lauderdale y John Scott Sherrill. El narrador tiene una conversación con la nueva pareja de su anterior novia, en la que le advierte de que esta le dirá que nunca le dejará. Pero a él también se lo decía…

Escuchemos ahora el tema que da título al disco, Honkytonkville. Obra de Buddy Brock, Dean Dillon y Kim Williams, aquí el narrador intenta superar su ruptura en la «ciudad de los bares honky-tonk, sobre la colina de los Taburetes».

Tell me something bad about Tulsa, de Red Lane, data de mediados de los 80. George Strait la recuperó para este álbum. Se trata de un canto de amor a Tulsa (Oklahoma), donde el narrador reta a que alguien le diga algo malo sobre esa ciudad, seguro de que no lo van a encontrar.

El tema ya había aparecido en el álbum Out Among the Stars (1986), de Merle Haggard.

El hijo de Merle, Noel, la versionó para su disco de debut One Lifetime (1997).

El tema que gozó de más éxito en este Honkytonkville fue Cowboys Like Us, que llegó al segundo puesto de las listas. Compuesta por Bob DiPiero y Anthony Smith, habla de los cowboys de nuestro tiempo que, en vez de cabalgar, van «sobre caballos de acero con ruedas».

El último single fue Desperately, de Bruce Robison y Monte Warden. El protagonista anhela desesperadamente estar con su amada, que le acaba de dejar.

El paisaje se viste de ocre

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Según la astronomía, hoy a las 10 de la noche, hora peninsular, daremos la bienvenida al otoño, que nos acompañará durante los próximos 89 días, hasta el próximo 21 de diciembre. Valiéndonos de este pretexto, escucharemos una serie de canciones country dedicadas a esta estación del año.

Los últimos estertores del verano –en que las temperaturas se resisten a bajar hasta las más agradables propias del otoño– se conocen como el veranillo de San Miguel o de San Martín (según las zonas). En inglés este fenómeno recibe el nombre de Indian Summer, y a estos primeros días del otoño hace referencia la canción que grabaron Brooks & Dunn en 2009 y que ellos mismos firmaron con la colaboración de Bob diPiero. Cuenta un romance entre un jugador de fútbol y una adolescente de Kansas cuya pasión se desvanece «cuando el viento del otoño barre las hojas». La chica, incapaz de hacer frente a las habladurías de su pequeña ciudad, se va a California.

El tema que vamos a escuchar ahora, The Boys of Fall, fue escrito por Casey Beathard y Dave Turnbull y grabado por Kenny Chesney en su disco Hemingway’s Whisky (2010). Una de las actividades que invariablemente trae el otoño es el inicio de la temporada deportiva. Los «chicos del otoño» del título no son otros que los miembros de un equipo de fútbol del instituto.

Green Daniels y Gretchen Peters le ofrecieron el siguiente tema, Chill of an Early Fall, a George Strait, quien lo incluyó en su disco homónimo de 1991. El protagonista sospecha que su pareja le ha sido infiel con un amigo con el que ha reanudado el contacto y siente los «escalofríos de un temprano otoño».

Skip Ewing y Max D. Barnes escribieron Autumn’s not that Cold en 1991, canción con la que Lorrie Morgan abrió su disco Something in Red. Con la llegada del otoño, la narradora echa la vista atrás y recuerda a un perdido amor de verano, pero se sorprende a sí misma al ver que no se siente especialmente triste y concluye que «el otoño no es tan frío».

Escuchemos la grabación de uno de sus autores, Skip Ewing.

Termino con la más antigua de las que vamos a escuchar hoy, pues se basa en un poema de finales del siglo XIX de D. J. O’Malley. Hice alusión a este tema en la entrada dedicada a los cowboys cantantes (ver entrada aquí). Cuando When Work’s All Done this Fall se vistió de música, alcanzó un gran éxito y, en 1925, la versión de Carl Sprague vendió la nada desdeñable cifra de 900.000 copias, todo un hito para la época. La letra cuenta la historia de un conjunto de cowboys que se reúnen por las noches después del trabajo y charlan sobre lo que harán cuando acabe la tarea en otoño. Uno de ellos desea volver a Dixie en compañía de su madre pero, cuando está guiando al ganado, hay una estampida, su caballo cae sobre él y muere. Sus últimas palabras son: «No veré a mi madre cuando se acabe el trabajo este otoño». El tema ha sido interpretado numerosas veces; y una de las más logradas se la debemos a Marty Robbins en 1966.

Michael Martin Murphey la versionaría en su álbum Lone Cowboy (2010).

 

Country Urbano (XXIV)

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61. Send me down to Tucson. Otra gran ciudad de Arizona es Tucson, famosa por transmitir la imagen más clásica del Oeste a través del séptimo arte –en sus proximidades, en Tombstone, tuvo lugar el duelo de O.K. Corral, y vivió Wyatt Earp–. En 1979 Mel Tillis publicó su disco Are You Sincere, que incluía esta canción escrita por Snuff Garrett y Cliff Crofford. Cuenta la historia de un tipo cuyo jefe le envía a Tucson, una ciudad a la que nadie quiere ir, para trabajar en verano. Libre de su mujer, aunque nunca antes le ha sido infiel, pierde la cabeza por una chica de la ciudad. Ahora lo único que quiere es que le envíen de nuevo a Tucson para “hacer el trabajo”.

62. Little Rock. Aunque la canción con la que entramos en el estado de Arkansas lleva por nombre el de su capital, Little Rock, en realidad “pequeña roca” es como llama la narradora a su pareja. Reba McEntire incluyó este tema en su disco Whoever’s in New England (1986), el primero de los suyos que alcanzó el número 1 en la lista Billboard. Escrita por Pat McManus, Bob DiPiero y Jerry House, narra la historia de una mujer que se casa con un hombre rico, pero no tarda en cansarse de él y planea abandonarlo.

63. Little Rock. Al contrario que la anterior, esta canción sí que está dedicada a la capital de Arkansas. Collin Raye grabó este tema, compuesto por Tom Douglas –fue su primer éxito como compositor– en su álbum Extremes (1994). Nominada por la CMA a la mejor canción del año, cuenta la historia de un ex-alcohólico rehabilitado: “No he tomado una copa en 19 días y mis ojos están claros sin esa niebla”. Empieza una nueva vida en Arkansas, como empleado de un videoclub de Walmart, y pretende reanudar su antigua relación: “Solo tengo un problema, sin ti, no soy yo”.

Country Urbano (XIX)

New Orleans French Quarter

New Orleans French Quarter


47. Girl in New Orleans. Poco más de un año después de triunfar con su versión de Help me make it through the night, Sammi Smith sacó su disco Something old, something new, something blue, en el que aparece este tema. Cuenta la historia de una mujer que se va de casa siguiendo a su amante a Nueva Orleans, este la deja embarazada y después la abandona. Muy apropiada su inclusión en un disco cuyo título hace referencia a lo que hay que llevar en las bodas para que dé suerte; ya que la protagonista, que no está casada, tiene que lidiar con la intolerancia de las demás mujeres, y no entiende por qué, «aunque parezcan tan elegantes, son como yo, pero los hombres a los que ven pagan un precio mayor por su tiempo».

48. I love New Orleans Music. Ronnie Milsap, el cantante ciego de los 70 y 80, también dedicó una canción a esta ciudad en la que la música se hace carne. Incluida en su álbum Inside (1982), la letra constituye toda una alabanza a la música de Nueva Orleans, la cuna del Dixieland, que se puede escuchar en el Vieux Carré (centro histórico) y por todo el lago Pontchartrain.

49. New Orleans. En 1999 aparecía el quinto álbum de Toby Keith, How Do You Like Me Now?, que incorporaba esta canción de Mark D. Sanders, Bob DiPiero y Steve Seskin, en la que una pareja se establece en Nueva Orleans y, pese a las infidelidades por ambas partes, se mantienen unidos.