En la entrada de hoy, y con motivo del Desfile del Orgullo Gay que recorre las calles de Madrid desde las 18:00 de esta tarde, abordaré un tema muy infrecuente en la música country.
Tengo el placer de presentaros a una figura pionera, rompedora: el cantante gay Patrick Haggerty, natural de Seattle, que en 1973 editó el álbum Lavender Country –country de lavanda o country lila–, considerado el primer disco gay en la historia de este género.
Reacio a la expresión de sentimientos homosexuales –al igual que sucedía con el western hasta el estreno de Brokeback Mountain en 2005–, el álbum fue condenado al olvido y apenas si vendió 1.000 unidades. En marzo de este año, un sello de Carolina de Norte, Paradise of Bachelors, lo ha reeditado. Según declaraciones de Haggerty a la revista Pitchfork, “el 98% del público norteamericano encontró el disco inaceptable y había que apartarlo de sus hijos a cualquier precio”. Lavender Country consta de 10 pistas, y quizá la más popular y controvertida sea Cryin’ These Cocksucking Tears, que comienza diciendo: “Lucho por el momento en que no haya hombres hetero porque todos tenéis una enfermedad común: no dais mucho amor y, sin embargo, lo tomáis cuando os place”.
En tiempos recientes, los cantantes country han hecho numerosos guiños a la comunidad homosexual. Así, la ganadora del Grammy Kacey Musgraves aconseja en una de sus canciones, Follow your arrow, de su álbum Same trailer, different park: “Besad a muchos chicos, o besad a muchas chicas si eso es lo que os apetece”.
En 1981, Ned Sublette escribió Cowboys are frequently, secretly fond of each other, que aquí escuchamos en la versión de Willie Nelson de 2006.
En 1992 Garth Brooks alcanzó un gran éxito, otro más, con We shall all be free, en la que declara que todos “seremos libres cuando podamos amar a quien elijamos” cuyo vídeo musical obtuvo un premio de la Asociación de Música Country al año siguiente.
Y en julio del pasado año, el joven cantante de Illinois Steve Grand nos presentó su tema All-American Boy, en el que el narrador expresa sin inhibición su amor por otro hombre. Preguntado por el impacto de su obra y acerca de si el género estaba ya listo para abrazar a una estrella gay, Grand mostró su esperanza de que las nuevas generaciones no se preocupen tanto por las etiquetas sexuales de los artistas. Desde luego, Grand está rompiendo moldes, y ya ha sido invitado a Good morning, America, uno de los programas más influyentes de la televisión estadounidense. A juzgar por el éxito de su álbum, se diría que el country sí está dispuesto a avalar, al fin, la normalización LGBT.
Y un último ejemplo. En la serie de televisión Nashville, creada por Callie Khouri y estrenada en 2012, hay un personaje ficticio, Will Lexington, que es gay y se hace pasar por heterosexual para triunfar en el country. Según Khouri, los prejuicios contra la comunidad homosexual son más patentes aquí que en otras corrientes musicales. Os dejo con el tema What if I was willing, que interpreta Chris Carmack en el papel Will Lexington, y que ha cantado en directo en el Grand Ole Opry.