El compositor de esta canción, Cy Coben, empezó su carrera sin centrarse en ningún género en particular, pero cuando en 1949 viajó a Nashville se dio cuenta de que lo suyo era el country.
A partir de entonces colaboró en mútiples ocasiones con Eddy Arnold, que fue quien grabó, originalmente, esta canción, una emotiva declaración de amor a su pareja. En aquel single, la cara B recogía otra composición del mismo Coben titulada Something Old, Something New.
Escuchemos la versión original de Eddy Arnold, que se mantuvo seis semanas como la más vendida en las listas de country y western.
Hay otra canción de los años 50 que suele confundirse con esta por la semejanza de su título, Baby Let’s Play House, obra de Arthur Gunther de 1954 y uno de los primeros ejemplos de rockabilly. Escuchemos la grabación que hizo Elvis Presley, que contaba a la sazón con 20 años.
Un año antes de su muerte en 1959, la grabó un jovencísimo Buddy Holly, que tenía solo 21 años.
Volvamos al country con la cara B a que he aludido antes, Something Old, Something New, en la que podemos apreciar el uso de la steel guitar.
Este dúo de hermanos trabajó poco tiempo juntos (solo grabaron entre 1944 y 1947). Chester, nacido en 1924, y Lester, en 1920, formaron un grupo llamado The Georgia Catamounts, que desarrolló toda su carrera en la RCA. Su retirada de los escenarios tuvo que ver con la deriva pop que iba tomando el country, que ellos no compartían. Chester se convirtió en un empresario de éxito y Lester reanudó su trabajo de juventud como soldador.
En 1996 salió un recopilatorio de sus grabaciones para la RCA con el título de su canción más conocida, Atomic Power. Fue editado por el sello alemán Bronco Buster, que se dedica a desempolvar canciones country de los años 40, 50 y 60.
Una de las primeras grabaciones de los hermanos fue High Tempered Mama (1944), en cuya letra se describe a su madre como una mujer de mal genio.
La canción más importante de los Buchanan fue, como hemos dicho, Atomic Power, escrita por Fred Kirby en agosto de 1945. La grabaron en marzo de 1946, solo unos meses después de las dos bombas atómicas que Estados Unidos lanzó sobre Japón. El tema evidencia el terror que infundía esta nueva arma y cómo un mal uso de este poder podía desatar la furia del cielo. Su éxito hizo que multitud de cantantes country se lanzaran a grabarla. Fue utilizada en la banda sonora de la película The Atomic Café (1982), un documental sobre la era nuclear.
Shut that Gate (1946) es un tema de carácter religioso en la que el narrador imagina su propia muerte: cuando va a entrar en cielo, oye a alguien gritar que cierren la puerta y no le dejen entrar porque ha vivido una vida de pecado. Por ello, recomienda a sus amigos que cambien de estilo de vida para que no les pase lo mismo.
Just Hangin’ On (1946) habla de las dificultades que encuentra el protagonista en esta vida. Siente como si estuviera intentando aferrarse a una inestable escalera.
Otro de sus mayores éxitos fue When You See Those Flying Saucers, obra de Charles Randolph Grean y Cy Coben de 1947. Esta canción también aprovechaba la coyuntura del momento: a principios de julio de ese año, en Roswell (Nuevo México), un granjero aseguró que una nave extraterrestre había caído sobre su finca, dando comienzo así a la fiebre por la ufología, acrecentada por el temor a un enfrentamiento entre la URSS y Estados Unidos en el marco de la Guerra Fría. No cabe duda de que la canción tuvo el don de la oportunidad, ya que fue grabada solo unos días después de aquel suceso. En la canción se dice que “cuando veáis esos platillos volantes, puede significar la llegada del Juicio Final”.
Entre la temática de las canciones que grabaron los hermanos Buchanan, destacan varias sobre trenes. Aquí tenéis Silver Meteor (1947). El Silver Meteor es un tren de dilatada historia: comenzó sus operaciones en 1939 y todavía se encuentra en funcionamiento, uniendo las ciudades de Nueva York y Miami.
Una de sus últimas grabaciones fue There’s Power Greater than Atomic (1947), que recuperaba la temática de su mayor éxito. Según la letra, hay un poder mayor que el poder atómico: “el poder de Dios”.