El silbato del tren (II)

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Steve Goodman escribió City of New Orleans en 1971. El Ciudad de Nueva Orleans es un tren que existe realmente y une las ciudades de Chicago, Memphis y Nueva Orleans a través de la oscuridad del Mississippi hacia el mar, como dice la letra. La versión más conocida es la de Willie Nelson en 1984.

Retrocedamos hacia uno de los pioneros del country, Jimmie Rodgers. Este escribió Waiting for a Train en 1928. El protagonista se muestra ilusionado por poder salir de su ciudad natal en uno de los prodigios del momento: el tren. Este es el inigualable Rodgers.

El conocido como rey del country en la actualidad, George Strait, incluyó Trains make me lonesome en su álbum Hold My Own (1992). El narrador se pregunta por qué los trenes le hacen sentir solo y recuerda que su padre les abandonó a su madre y a él cuando todavía era un niño montándose en un tren para no volver jamás. Fue escrita por Paul Overstreet y Tom Schuyler.

La siguiente canción está dedicada a Casey Jones, un ferroviario que existió en la vida real. En 1900 el tren que conducía sufrió un accidente y, aunque él perdió la vida, gracias a su pericia se salvaron todos los pasajeros. Escuchemos a Doc Watson interpretando Freight Train Boogie.

Como hermanos (VII): Delmore Brothers

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Brother in old town of Prague

Los hermanos Delmore fueron unos pioneros, nada menos que el primer dúo de música country que se dedicó a ello de forma profesional.

Se llamaban Alton (1908-1964), el mayor, y Rabon (1916-1952), el menor. Un cáncer de pulmón se llevó a Rabon el día después de su 36 cumpleaños, lo que puso fin al dúo. Tras su muerte, Alton se dedicaría a la docencia como profesor de música y, en 2001, ambos serían reconocidos a título póstumo por el Salón de la Fama de la música country.

Nacidos en el seno de una familia de Alabama pobre y numerosa –eran diez hermanos–, su madre, cantante de góspel en una iglesia, les inculcó su amor por la música. A los 16 años, Alton escribió con ella su primera canción, Bound for the Shore. Escuchemos la grabación de los Delmore Brothers ya en la última fase de su carrera, junto a Grandpa Jones y Merle Travis, dentro del grupo Brown’s Ferry Four.

Sus primeras grabaciones datan de 1931. A esas sesiones pertenece Alabama Lullaby, uno de sus temas de cabecera.

La popularidad los llevó al Grand Ole Opry en 1932, donde permanecieron hasta 1938, compaginando su labor con grabaciones para la Bluebird. Por ejemplo, este I’ve Got the Big River Blues (1933).

En diciembre de ese mismo año grabaron los dos siguientes temas. Gonna Lay Down My Old Guitar, un homenaje al yodel de Jimmie Rodgers que causaba furor en aquel entonces.

Y Brown’s Ferry Blues, que saldría como single en abril del año siguiente.

En 1944 firmaron con King Records, donde grabaron sus mayores éxitos. Uno de ellos fue Freight Train Boogie (1946), en la que Wayne Raney toca la armónica. El disco es considerado uno de los primeros ejemplos de rock and roll.

Pan American Boogie (1949) también pertenece a la época de King Records. El tren Pan-American hacía su recorrido de Cincinatti (Ohio) a Nueva Orleans (Luisiana).

Una de sus canciones más conocidas fue Blues Stay Away From Me (1949), en cuya letra el narrador pide a la tristeza que se aleje de él. Se diría un tema premonitorio: en poco tiempo, fallecieron la hija de uno de los hermanos, el otro hermano y el padre de ambos. Escuchémosla.

Nuevos miembros del Salón de la Fama de la Música Country

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En una rueda de prensa que tuvo lugar a finales de marzo, la Asociación de Música Country, CMA, a través de Sarah Trahern, y el propio Salón de la Fama de la Música Country, por boca de su director Kyle Young, anunciaron, como todos los años, los nuevos miembros del citado Salón.
Como viene siendo habitual, han sido tres los agraciados –el número ha ido variando a lo largo de la historia– para ingresar en la institución más importante de la industria. Los recién llegados se suman a los 124 que había ya, desde que en 1961 se creara el Salón de la Fama y Hank Williams, Jimmie Rodgers y Fred Rose lo estrenaran a título póstumo.
El edificio que alberga este museo se encuentra en Nashville, y es uno de los emblemas de la ciudad. Como sabemos, no es necesario estar vivo para optar a este honor. Precisamente, el primer socio de este año, Grady Martin, murió en 2001 y ha sido elegido para formar parte de esta institución en la categoría de artista activo antes de 1980. Nacido en 1929, Martin, que ya era miembro del Salón de la Fama del Rockabilly, fue un importante guitarrista de country que colaboró con Marty Robbins –tocaba la guitarra en El Paso–, Roy Orbison –en Pretty Woman–, Willie Nelson –en On the Road Again– o Johnny Horton –en La batalla de Nueva Orleans–. También fue muy celebrada su aportación guitarrística en Help Me Make it Through the Night, concretamente en la versión de Sammi Smith.
En la categoría de la Era de los Veteranos, Jim Ed Brown and the Browns han sido los elegidos. Brown, que acaba de cumplir 81 años, formó un grupo con sus hermanas Maxine y Bonnie, llamado The Browns. “La fama es efímera, los éxitos cambian cada semana, los galardonados y los nominados en los premios cada año, pero ser miembro del Salón de la Fama es para siempre”, dijo emocionado al enterarse de la noticia.
Por último, en la categoría de la Era Moderna, el grupo de country y gospel The Oak Ridge Boys ha sido investido con esta dignidad. Fundado en la década de los 40, adoptó su nombre definitivo en los 60 y hoy lo forman Joe Bonsall, Richard Sterban, Duane Allen y William Lee Golden.
Escuchemos un ejemplo de cada uno de ellos. En primer lugar, os dejo con Grady Martin en Freight Train Boogie, un tema de Red Foley en el que Martin toca la guitarra de doble mástil.

Uno de los mayores éxitos de The Oak Ridge Boys fue Elvira (1981).

Jim Ed Brown and the Browns interpretaron Three Bells en el Grand Ole Opry, tras la correspondiente grabación del single en 1959. La canción original fue escrita por el francés Jean Villard Giles y publicada en 1945 con el nombre de Les trois cloches.

No quisiera terminar sin la versión de este clásico ejecutada por la maravillosa Édith Piaf, lógicamente alejada del country.