El country en Eurovisión

Storm-Clouds-54
El sábado pasado tuvo lugar el festival de la canción más seguido del continente europeo, con Dinamarca como país anfitrión.
Esta edición, la número 59, ha contado con la participación de 37 canciones, 11 de las cuales fueron eliminadas en las dos semifinales previas.
Mucho se ha escrito y mucho se ha hablado sobre el dudoso buen gusto de este festival en su ya larga trayectoria. Dejando aparte a la ganadora del certamen, Austria, que no pasará a la historia precisamente por sus méritos musicales, el concurso se ha caracterizado, como casi siempre, por una sucesión de canciones pop y, en ocasiones, excesivamente discotequeras, del todo efímeras.
Pero centrémonos en el country, que, aunque es un género minoritario, casi testimonial, en Eurovisión, ha sumado este año dos representantes: Malta y Países Bajos.
La canción de Malta se titulaba Coming Home. Obra de la banda de country rock Firelight, fue compuesta y escrita por Richard Micalief, y acabó en el puesto 23 de 26. En verdad, no es una canción muy destacable.
Todo lo contrario que el tema de Países Bajos: Calm after the storm, una agradable balada country que ha alcanzado el número 1 en las listas en su país y el 15 en la vecina Flandes, lo que no está nada mal. La canción fue compuesta por el dúo holandés The Common Linnets, formado por Ilse Delang y Waylon, y en el festival ha acabado como subcampeona, tras la sobrevalorada Rise like a Phoenix, de Conchita Wurst.
La letra cuenta la historia de una pareja que ha pasado por graves dificultades. Ahora ella va conduciendo sola por la autopista, pensando con nostalgia en él.