Tras dos años en barbecho, desde que en 2014 sacara su disco The Big Revival, Kenny Chesney, de 48 años, vuelve a la primera plana con Cosmic Hallelujah, que vio la luz el 28 de octubre. Su intención inicial era que apareciera a principios de julio y llevara por título Somewhere in Town, pero lo pospuso para incluir una colaboración con Alicia Beth Moore, conocida como Pink, que trabaja sobre todo el pop. Producido por Columbia Nashville en colaboración con Blue Chair, Cosmic Hallelujah consta de 12 pistas, dos de las cuales, que vamos a escuchar aquí, han salido ya como singles.
El primero fue Noise, obra de Kenny Chesney, Shane McAnally, Jon Nite y Ross Copperman, que pudimos escuchar el pasado mes de marzo. La letra reflexiona sobre el ruido presente en nuestras vidas, que a veces nos impide disfrutar plenamente: “Sí, gritamos hasta quedarnos sin voz/ en las calles, en la multitud no hay nada más que ruido/ ahogando los sueños de este chico de Tennessee/ intentando hacernos oír en todo este ruido”. Chesney no pretende moralizar, sino poner de manifiesto una realidad.
El segundo single es la colaboración a la que aludía antes. Setting the World on Fire apareció el 28 de julio. Escrita por Copperman, Josh Osborne y Matt Jenkins, la letra narra el encuentro pasional de una pareja que promete que va a “incendiar el mundo”.
Cosmic Hallelujah en Amazon
River of country 
He visto este disco de Chesney en un par de webs…Suenan muy bien los dos temas, la verdad que para ser «country» tiene un sonido muy moderno. El estribillo del primero para mí es bastante pop. Buen vídeo, efectivamente toda una reflexión sobre nuestra sociedad, las tecnologías de la información, etc. Bonita balada a medio tiempo el segundo, me llamó la atención esa colaboración con Pink, me gustan algunos temas de ella.
El country actual tiende a fundirse cada vez más con el pop; por eso quizá detectas un sonido más alejado del country clásico. Es más, Pink, con la que colabora en la segunda canción, es una cantante que se ha centrado más en el pop. En cuanto a la letra de la primera canción, coincido plenamente, es una reflexión muy acertada sobre el ajetreo de la vida actual y nuestra excesiva dependendencia de la realidad virtual.