El primer cuarteto de cuerda de Nashville

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Chet Atkins concibió una interesante iniciativa en los años setenta: reunirse con otros guitarristas y formar con ellos un cuarteto. El fruto de esos encuentros, unas grabaciones celebradas entre septiembre y noviembre de 1978, fue el álbum The First Nashville Guitar Quartet, editado en 1979 por RCA Records.

El cuarteto estaba compuesto por el propio Atkins, Liona Boyd –guitarrista canadiense que había estudiado con Andrés Segovia, lo que explica que se incluyera un arreglo para guitarra del Concierto de Aranjuez–, John Knowles y John Pell.

Este disco ha sido reeditado en dos ocasiones junto con otros trabajos de Atkins: la primera, en 1997, con Me and My Guitar (1978); y la segunda, diez años después, con The Night Atlanta Burned (1975).

Llama la atención la variedad de estilos que aúna el álbum, a los que Atkins y su grupo dan una perfecta cohesión. Empezamos con un tema country que resultó un éxito para Anne Murray en Let’s Keep it That Way (1978) y que ganó el premio a la mejor canción en la Academia de Música Country. Sin más, You Needed Me, escrita por Randy Goodrum.

Os dejo ahora con la grabación de la canadiense Anne Murray.

El único single fue Love Song of Pepe Sanchez, de John Pell, una alegre melodía a la que Pell aporta un inconfundible sabor latino.

Vamos ahora con un tema propio de Disney, Someday My Prince Will Come, que escribieron Larry Morey –la letra– y Frank Churchill –la música– para la película Blancanieves (1937).

Una de las marchas militares más conocidas es The Washington Post March, un encargo de ese periódico a John Philip Sousa. Escuchemos la grabación de Chet Atkins.

Otro tema es Londonderry Air, una melodía que luego se utilizaría para la quintaesencia de las canciones irlandesas, Danny Boy, ya escuchada aquí.

El disco termina con dos adaptaciones de Chet Atkins de sendas piezas de música clásica, y es que este hombre se atrevía con todo. Primero, la citada interpretación del concierto de Aranjuez, que en el disco figura con el nombre Rodrigo Concerto.

Por último, una pieza de Johann Sebastian Bach inspirada en sus conciertos de Brandenburgo, Brandenburg, interpretada a la guitarra por los cuatro virtuosos.

 

Anne Murray, la primera superestrella canadiense

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Anne Murray nació en la provincia de Nueva Escocia (Canadá) en 1945, y su nombre es hoy sinónimo de música canadiense. Fue la primera artista no estadounidense que consiguió un disco de oro y la primera canadiense que ganó el premio al Mejor Álbum del Año de la Asociación de Música Country. Más de 50 millones de discos vendidos avalan su trayectoria.
Murray se interesó por la música a temprana edad. Su voz era alabada por todos, y aprendió a tocar el piano. Debutó en 1968 con el álbum What About Me, y un año después su segundo disco la catapultó a la fama, con el tema Snowbird, que escucharemos luego, entre sus pistas.
Su popularidad fue in crescendo y la industria del country estadounidense se fijó en ella tras su aparición en el programa de Glen Campbell. Durante los años 70 y 80, encadenó un éxito tras otro: Danny’s Song (1972), A Love Song (1973), You needed me (1978), A Little Good News (1983), Just Another Woman in Love (1984)… y muchos más. Tras mermar los aplausos en la siguiente década, se acabó retirando de los escenarios en 2008, y actualmente reside en Toronto.
Su primer número 1 fue Snowbird (1970), escrita un año antes por otro canadiense, Gene MacLellan. La canción se puede encuadrar en el country-pop y, aunque han sido muchos los artistas que la han grabado desde entonces, la versión más conocida sigue siendo la de Murray. Pertenece a su álbum This Way is my Way (1969) y el single fue el primer disco de oro de una artista canadiense en solitario, y el primero que acogió el recién fundado Salón de la Fama de la Música Canadiense en 2003. La protagonista quiere romper con sus ataduras, y se pregunta por qué su vida no es como la de un pájaro de nieve, que no necesita más que extender sus alas y salir volando hacia un lugar sin preocupaciones.

Lynn Anderson la incluyó en su disco Rose Garden (1970).

Ese mismo año Loretta Lynn la grabó en Coal Miner’s Daughter.

“El hombre que podía hacer hablar a la guitarra”, Chet Atkins, la incluyó en For the Good Times (1971). Su interpretación le valió un Grammy a la mejor actuación instrumental de country.

Os dejo con la versión de Hank Snow en su álbum Award Winners (1971).